The OC: Temporada 4 – Review

Cuando me dispuse a ver la última temporada de The OC, lo hice con algo de desgano. Se sentía una obligación, un simple trámite para terminar de ver la serie que en viejos tiempos estaba en boca (y vista) de todos. Y es que la 3ra temporada había dejado un terrible sabor de boca: el dramatismo exagerado que le habían dado a Marissa estaba matando todo lo bueno que la serie hubiese podido tener, con nuevos personajes que no pintaban nada por ningún lado, y tramas peores que las de los últimos años de Beverly Hills. O sea, éstos chicos, apenas en secundaria, estaban viviendo lo que Brandon y Kelly vivieron en 10 años. Y, fuera de si la escena fue emotiva o no, la muerte de Marissa nos dejó a todos pensando que The OC estaba perdida. El poco interés que aún quedaba en algunos, desapareció en ese momento.

Oh.. lo equivocados que estábamos.

Yo sé que más de uno leerá mi análisis con bastante escepticismo, recordando a esa serie que jamás recuperó el nivel que tuvo en sus primeros episodios y todo lo que hizo fue empeorar... Pero si The OC tenía algunas cosas salvables, eran sus diálogos y su sentido del humor. Más te reías con un episodio de ésta serie que con el de cualquier comedia del momento... Jamás se tomó en serio y estaba conciente de lo que era: una serie teen. Lamentablemente se distorsionó en la 3ra temporada, pero en la 4ta regresó con fuerza.

No me gustó mucho como comenzó la temporada. Era lo mismo de siempre: Ryan se va, lo buscan, quieren que regrese, termina haciendo alguna cosa violenta, y después regresa a su casa con el ojo morado. Tenía un drama forzado, pero creo que sirvió para explicar sus sentimientos con respecto a Marissa. Aunque no me pareció excelente, se tenía que lidiar con su muerte y cómo afectó a todos los personajes, y eso lo terminaron haciendo bastante bien. Julie creció como persona en ésta última temporada, pero no dejó de ser lo que esencialmente era. No nos vendieron un cambio “total”, de mala a buena, sino un cambio sincero y real, lo cual es difícil de hacer muchas veces, pero les funcionó. Summer se fue al otro extremo de la balanza con su cambio radical, aunque ya sabíamos que era una reacción a lo ocurrido con su amiga. La escena con el psicólogo fue de lo mejor que le tocó hacer a Rachel Bilson, y fue un ejemplo del gran momento por el que pasaría The OC. Por último, Ryan buscaba venganza en Volchok (con ayuda de Julie), pero al final terminó haciendo lo correcto. Y Marissa era historia del pasado.

Aunque estos episodios no son malos, fue a partir de ese punto que la temporada despegó con fuerza. Conocimos a “Che” (Chris Pratt, Bright de Everwood), aunque en un comienzo me pareció recontra tarado, eventualmente nos mostraron mejor sus facetas y le dieron un fondo al personaje que lo hizo no solo interesante, sino real. Summer regresó a sus antiguo yo, pero mantuvo algo de lo que pudo encontrar en su paso por Brown. The OC retornó con su gran sentido del humor, con historias más light y un drama mejor manejado.

Katlyn jugó un mejor rol en ésta oportunidad, ya que en la temporada anterior quedó bastante relegada por Marissa. El mal momento por el que pasaba su madre la obligó a calmarse un poco (aunque no del todo), lo que nos permitió ver varios lados de ella. No era tan bitch como parecía.

Y a la mejor pareja de la serie, Kirsten y Sandy, les tocarían momentos muy bonitos, pero por lo general quedarían también en un rol de observadores (especialmente Kirsten). Pero su presencia no se dejó de sentir. The OC giró más sobre los chicos y sus relaciones.

Y precisamente una de ellas fue un tremendo mega shocker para todo aquel (como yo) que no tenía ni idea de lo que ocurriría: Ryan y Taylor. A ella la cambiaron bastante, hay que decirlo, ahora sí parecía humana. La 3ra temporada la vi hace más de año y medio, por eso no recordaba cuánto la odiaba. De haberlo tenido tan presente, quizá no me comía el cuento, pero felizmente todo resultó bien. Como que crecieron en mi, no como la mejor pareja del mundo (que tampoco te lo pintaron así), pero sí como una pareja más centrada y real (dentro de lo que cabe). ¿No es bonito NO tener un final con parejas “predestinadas”? Claro que si.

En otras menciones especiales tenemos a Bullet, el amigo de Julie. Interesante personaje que, para realmente variar, resultó ser un millonario con cabeza y corazón. Caía bastante bien, para qué. También está Frank Atwood, el padre de nuestro joven Jack Bauer,digo, Ryan. No que su historia principal haya sido mala (tampoco fue buena), pero sí generó un interesante triángulo junto con Bullit y Julie, en uno de los mejores episodios de la serie y, de lejos, el más romántico: “The Case of the Franks”. Otro punto aparte: La música que han utilizado ésta temporada ha sido genial. En incontables escenas han logrado poner la melodía perfecta para el ambiente creado, y eso es novedad en The OC.

Los últimos episodios fueron interesantes. El terremoto se prestó a más de un susto (el bebé de Kirsten!) y a que, por primera vez, Seth salvara a Ryan y no al revés. Todo terminó bien, salvo la idea de que los Cohen se quedaron sin casa. El último episodio no fue espectacular, pero hace lo justo al contarnos lo que les pasaría a todos en un futuro, primero a 6 meses del terremoto (donde está ambientado el episodio), y después con rápidas visiones. No tuvo la mejor trama, pero fue bonito verlo. El momento más feeling fue cuando Summer le regala a Julie una cadenita con la foto de Marissa. Excelente. El cierre perfecto fue el abrazo entre Ryan y Seth, y la imagen del futuro en el que Seth se casa con Summer y Ryan ayuda a otro chico, tal y como Sandy lo hizo con él.

Para una serie que tuvo más bajos que altos, la 4ta temporada fue una excelente manera de irse. Nunca se puso mala, o demasiado dramática como en otros años, y se tomó por lo que era: conciente y con gran sentido del humor. Arriesgó mucho con Ryan y Taylor y al hacer episodios extraños como el de Chrismukkah, pero por lo general supo mantenerse en forma y entretenerlos. Es raro que vaya a decir esto, pero reamente voy a extrañar a The OC, especialmente después de una temporada así.

Puntaje: 8