La Final de la 4ta Temporada de Latin American Idol

No habrá sido increíblemente espectacular, pero al menos fue sopotocientas veces mejor que la del año pasado. Hubo sensación de final, y los 2 que salieron al escenario lo hicieron con intención de matar. Tal vez ese WOW que nos falta se deba a que todas las presentaciones saben a refrito (2 repetidas, y 2 canciones interpretadas 2 veces), pero creo que cada uno supo diferenciar su trabajo. En una semana de finales, al menos ésta vez no tuvimos un PUAJ.

A ver, creo que los 2 mantuvieron un buen nivel y supieron mostrar su estilo a lo largo de la noche. Eduardo comenzó con fuerza. La típica “ésta-canción-suena-a-balada-y-la-voy-a-cantar-como-Luis Miguel-pero-aumentándole-el-ritmo.-O-sea-como-Cristian-Castro…”, y digamos que le salió. “Digamos” porque la presentación estuvo bien, la voz genial… pero, en serio, ¿Esa canción se supone que va a ser un Hit? Que alguien me mande un mail si es que le gusta porque, aunque no estaba fea, está bastante lejos de ser un éxito. Ahora, los grititos al final. Igual que Marta ah ¿Será que ahora tener buena voz es ponerse a gritar? ¿O Eduardo quería imitar a Adam Lambert? Lo que sea, porque le salió más como Cristian Castro. Y, sin que esto sea novedad, éste último no es exactamente un referente de la música pop actual…

Pero bueno. Su re-interpretación de “La Soledad” estuvo bastante buena, mejor sin el final melodramático de la vez pasada, pero igual se sintió muy “Been there, done that”. Difícil superar la emoción y sorpresa de la primera pues, aunque no fue mala idea para nada. Aquella fue su mejor presentación, sino la mejor de cualquiera en toda la temporada. Sigo pensando que le faltó alguito para que me la crea por completo, pero sí le salió bastante bien. Su última presentación, por otro lado, aunque muy sólida, queda opacada por la de Marta. Miren cómo a pesar de ser 3 canciones muy distintas, las 3 terminan muy parecidas. Una cosa es tener un estilo, y otra no saber diferenciar lo que haces. Sino, terminas como Maná (50 000 canciones, todas igualitas…). No hay más análisis que hacerle, salvo que le salió muy Cristian Castro, y no hizo nada más. Bastante olvidable. Buena performance, voz, lo que quieran, pero olvidable.

Por otro lado, Marta, tuvo una tremenda noche. Plagada de errores vocales, pero como bien dice Mediavilla, en un punto de sus presentaciones ésta chica EXPLOTA, y ahí es cuando te enamora. La 1ra performance estuvo muy, MUY BIEN. Tremenda versión de una canción archiconocida, aunque hubiese sido bueno ver algún tipo de novedad o cambio en el 2do verso, porque todo cayó en lo repetitivo, pero igual me gustó bastante. Ahí tenemos una canción que sí tendría en mi Winamp… y ¿No se trata de eso éste show?

Su re-interpretación (me gusta la palabrita :P) de “Oye” fue en la que más sufrió su voz. Es su estilo, no es la primera vez que se sienten ese tipo de problemillas en sus presentaciones, pero ésta vez fue tanto que le bajó el rendimiento. Aún así, y gracias a la tremenda personalidad que se maneja (un plus cada vez que sale al escenario) le salió bien. Aunque la 1ra vez que lo hizo le haya salido mejor.

Y, bueno, para diferenciarlos bien ¿No? Su interpretación de la canción inédita se sintió muy diferente a la de Eduardo. La verdad, aunque la sentí mejor y más manejada por ella, no terminó de convencerme. Claro, tuvo un final de AQUELLOS, divirtiéndose y dirigiéndose a todo el público (¿Alguien NO va a votar por ella después de eso?), pero insisto en que esa canción no suena a éxito. Hasta la del año pasado estuvo mejor (al menos el coro estaba decente).

Tuvimos una final interesante, con buenas performances en general, aunque creo que le faltó una realmente genial. De todas, mañana sabremos quién será el nuevo LATIN AMERICAN IDOL!